Te detesto, te odio, te quiero, donde estabas cuando todo se marchito. Mi corazón ya no late, no late con nada ni por nadie, y menos por ti. Pero aun esta la herida, tu herida y necesito curarla viéndote una vez mas. Me he perdido o quizá no me he perdido si no que siempre lo he estado. Nunca has hecho nada, todo era oscuro y ardiente, vivíamos tan cerca que todo ardió. Los últimos rayos del día nos asfixiaron durante mucho tiempo. Irrumpiste en mi vida y me gusto, pero entonces la tierra se quedo muda. Todo era sol, y el sol nos doro, pero no pudimos evitar que todo se secara, eramos como la hierva del campo que poco a poco la seca el verano, eramos el rio que el agosto seca, eramos un ramo de flores en un jarrón. Comencé a llorar durante muchos días, tu te entristeciste, y la rabia se adueño de nuestro interior. Quisiste olvidarme yo lo intente, pero no pudimos. Tu vuelves, cuando menos te hecho de menos y la dependencia a ti al final acaba envolviéndome. No quiero volver a morir por ti.
(CONTIGO EN MI INTERIOR SE PRODUCE EL MATRIMONIO DE LA MUERTE)
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